EL COLOR DE LA TOSTADA – GESTIÓN DE COLOR.
Recientemente he vuelto a releer un artículo que me gustó bastante en su momento. Trata sobre la gestión de color poniendo como ejemplo el color de la tostada, una analogía perfecta explicando un proceso en el que muchos términos confunden a quien simplemente quiere introducirse en este tema:
Imaginemos a Jacometti, el amigo de Prontor, que es un fanático de las tostadas, un obsesivo que todas las mañanas necesita tomarse su tostada del mismo tono, ni muy quemada, ni poco hecha. Jacometti se levanta temprano todos los días, va la cocina y enciende su tostador, sabe que en la posición, digamos “4”, le dejara una tostada tal como a él le gusta, tal y como siempre la ha tomado. Ahora bien ¿y cuando Jacometti va de vacaciones cómo consigue ese mismo color de tostada en el buffet del hotel?, ¿poniendo la tostadora del hotel a la misma posición “4” conseguirá el mismo color en el pan? ¡Ya te digo yo que no!
Este es el problema de la gestión de color, los ajustes realizados en una tostadora son únicos para esa máquina y como mucho se asemejarán en marcas y modelos iguales. Lo mismo pasa con los valores RGB de nuestro ordenador y los diferentes dispositivos, son solo configuraciones que al enviarlos a diferentes dispositivos nos mostrará también resultados diferentes.
¿Entonces que tendría que hacer Jacometti para conseguir siempre el mismo color de tostada en su casa y en el hotel donde
va de vacaciones? Bueno, pues tostaría tantas piezas de pan como configuraciones diferentes tiene su tostadora y las ordenaría en su mesa. Luego pediría al hotel que hiciera la misma operación con su tostadora y le enviase esa carta de color de la tostadora y… ¡boom! Jacometti ahora puede ver la equivalencia entre las configuraciones de ambas tostadoras. Sin que nadie se lo haya explicado ha muestreado lo que hace su dispositivo (cámara, tostadora, impresora o lo que sea) y lo ha comparado con una guía de color real para que el resultado sea el que él es esperaba en ese otro dispositivo: ¡acaba de realizar su primera gestión de color!
La gestión de color trata controlar la forma en que se representan los colores en diversos dispositivos (cámaras, escáner, monitores, impresoras, etc…) y mantenerlos constantes en cada uno de ellos. El objetivo final de la gestión de color es asegurarse que todos los colores se vean igual en todos los dispositivos que usamos en el flujo de trabajo.