Te Deum

[justify]El Te Deum, final del primer acto, es a buen seguro una de las escenas cumbre de la ópera Tosca (G. Puccini, 1900). Para el que no la conozca, dejo al final del post un enlace en el que lo canta el maravilloso Bryn Terfel en la producción de la Royal Opera House Convent Garden. 
[/justify][justify]En la producción que se puede ver en la foto se opta por una visión más limpia y minimalista, escenario giratorio, prácticamente vacío, solo con Scarpia el obispo... y Pasolini, aunque eso es "otra historia". No está exento de espectacularidad ya que ante la impresionante fuente de luz proveniente del escenario, el público se ve envuelto por el sonido del coro que se encuentra situado casi en la cúpula del Teatro, a unos veinticinco metros de altura.

Una coproducción del Teatro de la Maestranza, el Théâtre Royal de La Monnaie - De Munt, la Opéra Comédie de Montpellier y el Gran Teatre del Liceu, con la dirección de escena de Rafael Rodríguez Villalobos. En la foto, Yolanda Auyanet (Obispo-Tosca), Ángel Ódena (Scarpia) y el actor Nacho Gómez en el papel de Pasolini.[/justify]
 

¿Es en el teatro de La Maestranza ?? Es una versión muy moderna de Tosca...

Esta muy bien aprovechada la puesta en escena para la foto, y las cabezas de los espectadores iluminadas desde el escenario, cojonuda.. por lo general el público está en penumbra..

¿Solo es un disparo? Lo digo por la inmensa luz central del escenario y lo bien que se ve a ¿Scarpia? en el centro..

Es buena

Hola Berna! Sí, es el Teatro de la Maestranza, mi lugar de trabajo. Digamos que me faltaba esta foto y la tomé el sábado durante la última función, como puede verse no es un ensayo. apuesta cerrada, pero bueno, disparé desde un sitio adecuado para no molestar y como la cámara tiene un obturador central en el objetivo el sonido es casi imperceptible. La versión es absolutamente moderna y, aparte de la escenografía, la polémica se ha suscitado a nivel nacional, incluso más que cuando se pudo ver en el Liceo en el mes de enero, porque se hace un paralelismo entre el personaje de Mario Cavaradossi y Pier Paolo Pasolini, nunca invasivo con la partitura, lógicamente. La "discordia" se produce al comienzo del segundo acto en el que al principio del segundo acto aparece el actor que encarna a Pasolini haciendo una proclama en favor de la libertad de expresión de los artistas y contra el poder político y la Iglesia, saliendo acto seguido Pelosi, el chapero con el que se fue y a manos del que al parecer resultó asesinado -hay un halo de misterio en todo esto en función del estado en el que se encontraba su cuerpo-. Simultáneamente suena la canción "Love in Portofino" interpretada por Fred Buscaglione. La escena termina con un beso de ambos y se levanta el telón donde comienza a sonar la partitura del segundo acto con Scarpia cantando ya el "Tosca è como un Falco..." Hay un reel en mi perfil de IG con fotos de la escena y con la misma versión de la canción. El día del estreno y de la segunda función hubo abucheos, acallados por aplausos. incluidos gritos de tinte homófobos tales como "para qué queremos más maricones..." y similares.

En fin, no me enrollo más con el tema artístico. La toma es un HDR de tres fotos con un paso de diferencia para dejarla tal cual se veía, no pretendía alterar el resultado escénico. Precisamente lo interesante es que el público queda completamente iluminado por el fogonazo de luz que produce la subida del "forillo" del final quedando al descubierto la enorme pantalla LED del fondo. La única forma de ajustarlo era a través de un HDR dada la diferencia existente entre el público y la luz que sale del escenario.

Scarpia, el personaje de la izquierda, tiene un foco que lo ilumina y que viene de la parte superior izquierda de proscenio. El personaje del centro es normalmente un obispo pero en esta ocasión se ha puesto a la propia Tosca encarnado e papel de la "Madre Iglesia". Tiene un foco cenital que la ilumina, de ahí que atenúe bastante el contraluz que provoca la pantalla LED del fondo. El personaje de la derecha es Pasolini, que observa la escena, y recibe la luz reflejada tanto del foco cenital del obispo como, sobre todo, el propio reflejo del suelo, que es completamente blanco.

Un abrazo!