Madrid, 4 de agosto de 2011:
La policía cierra a cal y canto la Plaza del Sol. 35 grados a la sombra.
Para cruzar esa zona de Madrid hay que dar un rodeo impresionante y con el sonido de varios helicópteros sobre nuestras cabezas. Parece una ciudad tomada.
Esta muJer, después de intentar convencer al policía de que su hija trabaja en el Burguer de Ópera y que le duelen mucho los pies como para dar el rodeo quie se le "sugiere", se sentó en el suelo y comenzó a entonar un cántico sueve y monótono en su lengua natal.
Hora y cuarto más tarde, cuando volví a pasar por allí, ella aún seguía sentada.
(FOTO SACADA CON SU PERMISO)