Excelente toma. Nuestra inconfundible Toledo, pero otra vez diferente. Eso es la fotografía: algo en lo que importa tanto el objeto como el sujeto que lo refleja para transmitir algo.
A mí esta toma me evoca la “peñascosa pesadumbre” de Cervantes.
No pude “subir al casco” el jueves, pero bien que lo eché de menos. El Corpus es siempre el Corpus.