Fuensalida

De un paseo por Fuensalida, entreteniéndome mientras las acompañantes buscan zapatos Otra vez en tríptico, por mostrar las tres que más me gustan.

Bienvenido al apasionante género de la fotografía de calle... Aunque te animaría a llevarte el visor al ojo y no disparar con la cámara colgada (es una técnica para pasar inadvertido y viene bien para iniciarse)...

Rubichi escribió: Bienvenido al apasionante género de la fotografía de calle... Aunque te animaría a llevarte el visor al ojo y no disparar con la cámara colgada (es una técnica para pasar inadvertido y viene bien para iniciarse)...

Uy, no, qué vergüenza jajajaja

Todo es cuestión de probar y pedir permiso, en el peor de los casos el no foto ya lo tienes, la gente es muy amable y te sorprenderá su amabilidad.

Este tema puede dar para unas reflexiones

Cuando tenga un rato, organizo un poco las ideas y pongo un post con mis opiniones sobre el tema y forma de fotografiar en la calle, fotógrafos que me gustan y fotógrafos que no tanto.

Pido permiso pocas veces, aunque tengo algunas donde la persona fotografiada ha sido advertida previamente de ello. No pido ese permiso porque tenga el pensamiento de estar haciendo algo malo, ejerciendo la delincuencia con una camára en la mano, o me dé vergüenza -que sí me da-, sino porque no me interesa el retrato en sí, sino la instantánea, lo accidental o espontáneo de la persona en el entorno urbano, que se perdería si la persona que aparece es consciente de estar siendo fotografiada.

Esa es la idea para utilizar esta técnica. Como dice Rubichi, está bien para ir cogiendo un poco de práctica, y porque la cámara utilizada se presta a ello, pudiendo tirar en ráfagas a intervalos preestablecidos sin tocar el botón de disparo. Además, colgada al cuello no pesa demasiado y es silenciosa.

La técnica que utilizo más, que me suele funcionar en todos los ámbitos de mi vida, es hacerme el tonto y el despistao.

Alberto, gracias por tus comentarios. Me encanta fotografiar personas anónimas, pero siempre se me crea esa batiburrillo entre la vergüenza, el hacer algo sin permiso del transeúnte y si pides permisos previamente, pierdes el instante natural y espontaneo. Difícil dilema.
Siempre que he hecho este tipo de fotografías, que curiosamente se denominan "fotos robadas", el término ya nos indica que poseen cierto carácter delictivo, ilegal.
Esta culpita que sentimos al hacer este tipo de fotos tiene que ver con el placer del voyeur, es decir , con gozar mirando al otro, disfrutar con el otro sin que el otro sepa de nuestra presencia y nuestro disfrute.
La culpa, en este sentido, tiene que ver con el sentido y la finalidad de nuestro acto de fotografiarlos. Si partimos de una motivación creativa y artística no deberíamos sentirnos culpables ni inquietos, pero indudablemente este acto creativo puedo chocar con el deseo de la persona fotografiada y su deseo legítimo de no ser fotografiado.
El mes pasado cuando estuve de viaje fotografico por por la comarca de Las Batuecas, en unos de los valles de sus valles desiertos, apareció al doblar una curva una viejecita milenaria, encorbada, con una garrotita, toda de negro con un rostro arrugadísmo y un ojo talmente blanco y el otro azul que hacía de su persona,un personaje digno de ser fotografiado. Como venía despacito me acerqué a ella con mi Nikon colgada al cuello, las mejores de mis sonrisas y educación y la pregunté que si podía hacerla una fotografía. La viejecita que apenas avanzaba un metro cada 5 segundos alzando su garrota al viento , se abalanzó sobre mi, emitiendo gritos y palabras incomprensibles, pero dejándome claro que no quería que la fotografiara. Me sentí fatal y sin fotografía. Si hubiera cogido el zoom sin que ella lo advirtiera, habría hecho la fotografía y nada habría cambiado en la vida de aquella viejecita.

Gracias por la aportación DrZymerman. Has citado la palabra mágica "robado". En el post que adjunto comento mis impresiones sobre el término, junto a otros temas. Ahora lo colgaré en charlas y debates.

Aquí

Gracias de nuevo y un saludo.